23.5.04

Acabo de leer El País y estoy empachado de boda. ¿Por qué lo llevo tan mal? Me he deprimido, compruebo que no es que no me importe el fasto, es que me afecta en exceso. ¿Cual es el motivo? No es la indignación por el dinero que se han gastado. Yo creo que va más orientado a que pienso que Letizia es la muestra de que el amiguismo, el peloteo y el enchufismo prima sobre la profesionalidad; quizás sea porque conozco a gente que me parecen buenos profesionales y no cuentan con padrinos y están jodidos -como yo o peor-. Y leo gente como Letizia que va de un marido a otro, de un novio a otro, que tiene un padre conocido, que asciende como la espuma en pocos años y, para mi desgracia, no me creo que haya sido por sus valores "profesionales".
Siempre recordaré una entrevista que una vez, hace mucho tiempo, leí con el fundador de las tiendas Don Algodón. El tipo se enorgullecía de haberse "forjado" a si mismo y contaba con todo su descaro que la primera tienda la había puesto vendiendo una "cadena de oro que mi padre me regaló por mi cumpleaños". A mi, mi padre jamás pudo regalarme una "cadena de oro" que costara tanto como para que su venta me permitiera poner un negocio.
No me meto con que luego ese negocio funcione, que también tiene su mérito, pero tu, que me lees y que tienes poco dinero, que para poner un negocio o comprar un piso tienes que entramparte con el banco a 25 años...piensa si las cosas te van mal, ¿podrías vender la "cadena de oro" que tu padre te ha regalado por tu cumpleaños para salir del atolladero? ¿o más bien el banco te quitaría todo lo que tienes y no volverías a levantar cabeza?
Conozco de lejos a una familia en la que todos los hijos, y son unos cuantos, han ido triunfando por la vida, la mayor parte de ellos empezaron a estudiar y se cansaron pronto pero han terminado con tiendas que funcionan, otro de fotógrafo, otra de directora de una inmobiliaría...todos muy bien colocaditos.
Ahora viene el secreto del éxito en la tierra de la igualdad de oportunidades: el fotógrafo se fue a hacer reportajes a África con la cámara que le había regalado papá -¿qué hubiera pasado si tu que me lees hubieras hecho lo mismo? Primero: no tendrías esa súper cámara, segundo: no te habrías podido pagar el viaje con las 500 pesetas que te daban los sábados hasta que empezaste a trabajar, tercero: habrías perdido tus estudios, cuarto: si te hubiera pasado algo en África...¿habría podido ir papá a buscarte y sacarte del lío? Piénsalo-.
El de las tiendas las puso yéndose a comprar cosas a Asia -¿tienes dinero para irte a Asia e invertir en un distribuidor y luego poner una tienda aquí? Seguro que los comienzos son duros...¿tienes dinero para afrontar los pagos al banco del alquiler de la tienda? Mejor que te lo pague papá hasta que todo vaya bien-.
Y la directora de la inmobiliaria...lo es desde los 35 años que estaba en paro sin trabajo -pero viviendo en el lujo, claro, no como tu y yo-, se murió papá y la niña tomó las riendas de la empresa. No me meto con que sea buena profesional, la conozco, es maja y creo que lo hará bien, el negocio funciona...pero...¿si papá no hubiera tenido la inmobiliaria? Pues estaría como estás tú, como más de 30 años, en paro y deseando irte de casa de papá y mamá.
Mierda de vida y mierda de mundo.