Tapas
Acabo de ver una excelente película. Nunca me ha gustado el cine español. Casi todas las pelis me parecen cutres, pretenciosas, con malos actores pero normalmente muy bien realizadas técnicamente. Vamos, justo lo contrario a lo que debería ser el buen cine.
El buen cine debe preocuparse por el fondo y no por la forma. O mejor debería decir por el fondo y no por tener una forma perfecta. No significa esto que todo valga sino que en el arte, y el cine lo es, es mucho más importante transmitir que el cómo lo transmitimos. Pues eso es lo que consigue Tapas. Los actores hablan de calor agobiante y la iluminación no lo sugiere, hay un clima atemporal, una luz indirecta que parece que la película fuera rodada para televisión. Pero todo se te olvida con el entrecruzar de excelentes historias contadas de maravilla con buenas interpretaciones y sin pretensiones. Tapas es una auténtica maravilla, una gran película, mucho mejor que todas las que nos intentan vender de los "grandes" maestros. Es tan buena como las primeras películas de Berlanga. Os la recomiendo, se merece un sobresaliente.
Y ayer vi La intérprete. Sidney Pollack es un gran director y la intérprete no está mal. Está a años luz de las pelis horteras americanas que han inundado este año la cartelera pero tampoco llega mucho más allá del aprobado alto. Para una tarde de domingo y poco más.
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