“ Cuando dejaste de creer en Dios –continúo Will-; ¿dejaste de creer en el bien y en el mal?
-No, pero dejé de creer que existían un poder benéfico y un poder malévolo que estaban fuera de nosotros. Y me convencí de que el bien y el mal sólo designan las acciones de las personas, no lo que éstas son. Sólo podemos decir que ésta es una buena acción porque beneficia a alguien, y que esa otra es una mala acción porque perjudica a alguien. Las personas son demasiado complejas para ponerles unas simples etiquetas.”

“El catalejo lacado” 3º Libro de La Materia Oscura de Philip Pullman

Acabo de terminar de leer esta trilogía. Es una obra de fantasía para todos los públicos que encierra dentro mucha filosofía. No estoy exactamente de acuerdo con la frase que os he puesto pero si creo que induce a pensar. Creo que efectivamente las personas somos demasiado complejas para etiquetarnos pero desde luego si hacemos más malas acciones que buenas podemos decir que somos una “mala” persona.

En la Materia Oscura se meten a tope con la Iglesia, con deciros que matan a Dios y al Metatron…aunque no le llaman así - es la Autoridad- y hablan de que el bien son los ángeles caídos, que fueron los que realmente se rebelaron contra el ser de las cosas. Supongo que habrá alguna lista circulando por el Vaticano en la que Philip Pullman estará prohibido.

Me ha gustado mucho como obra llena de simbología, como literatura no es desde luego digna de un premio Nóbel porque la historia que cuenta hace aguas por muchos sitios. Sin embargo está llena de desbodante imaginación, muestra decenas de criaturas asombrosas que interrelacionan entre ellos: arpías, brujas, osos polares acorazados, daimoniones, humanos, espíritus, espectros…y una increíble cosmología que nos ha enganchado a Marisa y a mi desde el principio y nos ha hecho devorar los tres libros en muy poco tiempo. Os los recomiendo u os los presto. Merecen la pena.