25.4.04

Hace ya algún tiempo que no voy al cine. Sigo saliendo los viernes pero nos hemos perdido algunas películas que eran especiales. Tendré que recuperarlas en vídeo aunque no es lo mismo. Me apasiona el cine, me transporta a mundos imaginarios, me hace sentir, me identifico... algunas veces pienso que va a terminar ocurriendo lo de Mia Farrow en La Rosa púrpura de El Cairo y que saldrá alguien a buscarme de dentro de la pantalla y descubriré que ese es el mundo real y no el que veo todos los días. Ese día será especial.
Hoy he soñado que era otra persona. Ha sido muy curioso. Tenía otra familia, vivía en otro sitio, era diferente. Me miraba al espejo y no me reconocía. Y lo más curioso es que no me importaba. No me acuerdo de los detalles pero ha sido un sueño agradable, era un mundo color de rosa muy tranquilo. Me ha recordado -el cine, siempre el cine- a una parte de Star Trek: Generations. Picard es transportado a un mundo en el que todo es diferente: tiene una familia, vive en una casa señorial...y se siente feliz. No porque en el Enterprise y en la vida que lleva no lo sea, sino porque descubre que se puede ser feliz de diferentes formas. Quizás que la felicidad está dentro de nosotros. No lo sé. Dentro de mi la busco todos los días, como supongo que hacéis todos, algunas veces la encuentro y otras se me escapa entre los dedos, entre los agujeros del corazón. Se que está ahí y que no está mal que sea huidiza, ser siempre feliz debe ser muy aburrido y seguramente te hace perder la perspectiva, si no conoces el mal es muy posible que no puedas distinguirlo y no puedas apreciar en su justa medida el bien, por eso pienso que todos los días hay que esforzarse, trabajar para ser querido y aunque no lo consigas pensar que cuando amanece hay un nuevo día en el que luchar, que se pueden perder batallas pero nunca se debe dar por perdida la guerra.
Como podéis comprobar hoy estoy sumamente poético, filosófico diría yo, deben ser los champiñones que estoy haciendo, que seguro son alucinógenos.
No os cuento cosas de mi vida, del exterior de ella porque acabo de hablaros del interior, porque no ha pasado nada especial que salga de lo normal. Bueno si, a mi amigo Jaime le despiden en 15 días -otro más al club- y la han mentido, engañado y torturado hasta la saciedad. Una nueva muestra de que o vas preparado o te las llevas todas. Pobre.