Ayer comida en Bustarviejo -no estuvo mal el chuletón aunque tampoco fue nada del otro mundo-. Y luego por la tarde primera intentona para ver la exposición de los Guerreros de Xi'an. Había una cola espectacular así que nos fuimos a tomar un café. Eran las 7 de la tarde. Volvimos a las 8 y media y estaba vacío. Así que ya lo sabéis: a última hora (cierran a las 10), a mediodía o a primera hora.

La exposición no está mal. Parece más espectacular de lo que realmente es. Hay un mega montaje para mostrar diez guerreros que realmente es lo interesante. Lo que más me llamó la atención es que todos son diferentes. Tiene que ser impresionante ver los miles de guerreros de terracota de la tumba del emperador...y cada uno con una cara distinta. También me llamaron la atención dos elementos sexuales -así lo ponía en el nombre- de bronce. Uno era un consolador y el otro una especie de funda para el pene también de bronce. ¡Qué bestias eran los chinos!

En cualquier caso merece la pena ir a ver esas 10 estatuas. Entran ganas de irse a China a ver los demás. Hay dos sitios del mundo que no me gustaría perderme antes del final: las pirámides de Gizeh y la Gran Muralla China.