10.1.04

Pues mira, te voy a tomar la palabra y voy a escribir un poquito.

Lo primero de todo... ¡Hola a todos!
Soy Daniel Sánchez. Algunos me conoceréis de Red2000 como "El Azote de Javier De La Guardia" Si, yo soy el que metía la pata cada dos por tres con Cybernautas y causó una calvicie más pronunciada (Aún) a nuestro querido anfitrión virtual.

Escribo por dos razones. La primera por el sentimiento egoísta de sentir que formo parte, de algún modo, de la memoria de alguien tan especial como Javier. El segundo porque ahora, justo a la 1:00 AM y cuando acabo de volver del trabajo... siento que tengo algo que decir.

Ese algo es que... Cuidéis a los amigos, y seais felices.

En ocasiones me siento un poco chafado, preocupado o irritado por diferentes circunstancias de la vida. Y si, sinceramente creo tener motivos para ello. Pero todo adquiere, de verdad, otra importancia cuando se tiene un grupo de verdaderos amigos. De gente que realmente te conoce y por ello, o pese a ello, te quieren y te cuidan. Eso vale muchísimo.

Mis amigos hoy están lejos. Están en Cáceres, pasando el fin de semana en una casita rural. De ahí sin duda este momento nostálgico que vivo. Me han esperado hasta el último momento, pero al comprender que mi estancia en el trabajo se prolongaría hasta tan tarde, les he dicho que se fueran sin mi. Les echo de menos, pero sé que habrá otros fines de semana, al igual que ha habito otros muchos antes de este.

Lo que quiero decir es que me siento arropado. Tengo mi grupo y soy feliz. Pero eso no me impide ver y reconocer otros grupos. La mayoría se basan en el colegueo, en la apariencia calmada como el hielo pero bajo la que se ocultan fuertes mareas. Me alegra decir que no es vuestro caso.

No es mi inteción describiros a cada uno porque, como dijo un viejo Hobbit: "No les conozco a la mitad de ustedes la mitad de lo que querría, y lo que yo querría es menos de la mitad de lo que ustedes merecen". Pero sin duda el paisaje que observo desde la distancia transmite multitud de caracteres, pensamientos, inquietudes y sentimientos que merecen la pena ser explorados. Y todo porque al conjunto le sobrevuela esa casi olvidada importancia real que tiene la amistad con mayúsculas. Esa amistad que, gente como Javi, nos hace recordar y de la que nos podemos sentir orgullosos.

Tened la certeza de que mucha gente no encuentra un hogar nunca en el que alojar su verdadero yo y sentirse a salvo.

Nosotros lo tenemos. Seguid así.
;-)
Somos afortunados.

Un abrazo a todos.