Acabo de ver "Lemony Snicket, una serie de catastróficas desdichas" y me ha gustado mucho. En una época en la que los adolescentes ven estupideces como Los Serrano, Ana y los Siete y gilipolleces de ese estilo que les hacen creer que la vida es solamente preocuparse de a quien te follas hoy y mañana, películas como Lemony Snicket estimulan la imaginación. Una auténtica gozada con moraleja. Eso sí, reconozco que podría ser mejor.

También quiero hablaros de la manifa que están organizando los grupos retrógrados de este país de mierda en contra de los matrimonios homosexuales. ¡Y encima la iglesia católica se une a la fiesta! Casarse es una gilipollez, es igual que firmar un contrato, a algunos les gusta y a otros no...pero no deja de ser algo "artificial", algo que nos hemos inventado. Manifestarse para defender algo social y voluntario es una mamarrachada. Supongo que en las sociedades en las que existía el matriarcado, el concubinato, etc., etc., el matrimonio monógamo les parecería un escándalo. La monogamia es algo que está dentro de uno mismo, si no se hace daño a los demás no deja de ser otra costumbre social. Y la homosexualidad es, como el matrimonio y la monogamia, totalmente voluntaria. ¿Piensan los que van a salir a la calle que los homo van a violar a sus hijos? Vaya una mentalidad que tiene nuestra querida iglesia. Nos esperan tiempos difíciles.

Textos del pasado. Guarros, qué sois unos guarros!
Archivos Identidades. Escandalo publico, por Antonio Royo Marin.

Gruppo Ceramiche Gambarelli - Oxygena, the first anti-pollution tile

Estuve el domingo en el parque Warner Lusomundo. Vaya una basura. Bueno, me explico, tampoco es que sea una basura sino que la relación calidad-precio no acompaña. Los tres nos costó 100 euros entrar y dentro todo es caro caro caro...y las atracciones, aunque están bien no pasan de ser montañas rusas "maquilladas". Nada especialmente espectacular. Los espectáculos tampoco son gran cosa, mucho golpe simulado y explosiones variadas pero poco más. Comer una hamburguesa con patatas y coca cola sale por unos 10 euros, lo que también ya es carito. Una coca cola de máquina cuesta 2 euros y medio y una botella de agua 1 euro 20. Precios europeos. El párking, que va aparte, cuesta 5 euros.
Y eso no es lo peor: se estropeó una máquina de coca colas y nos costó media hora que viniera alguien a devolvernos el dinero. La máquina no funcionaba y estaba a pleno sol, las coca colas calientes, nos abrieron otra, pero...dejaron encendida la máquina averiada.
En otra atracción discutí con la encargada porque lo único que había en la puerta era un cartél escrito a rotulador que decía: atracción en funcionamiento esperen que vengan a buscarles. Y esperamos esperamo y esperamos. Y a los 20 minutos casi tiro la puerta abajo. La respuesta fue: es que estamos sólo 2 y si mi compañero atiende dentro yo tengo que ayudarle. 16.000 pesetas y falta de personal.
Estaba también sucio y descuidado, no demasiado, pero se notaba la falta de personal. Estaba vacío. No había ni una sola cola. Había restaurantes cerrados y lo mejor de tod, horario europeo: de 10 a 21 -de 10 que abrían las puertas porque las atracciones empezaban a las 11-.
Vamos que si queréis tirar vuestro dinero mejor lo hagáis en el Parque de Atracciones: más horas, más diversión, más servicio, más barato. Eso sí, no están Piolín ni Batman pero creo que podré sobrevivir sin ellos. Luego postearé algunas fotos a Blogspirit.